Como hacer un benchmark

Evaluación comparativa de la competencia

Bernard MarrBernard Marr es un futurista de renombre mundial, influenciador y líder de pensamiento en los campos de los negocios y la tecnología, con una pasión por el uso de la tecnología para el bien de la humanidad. Es un autor de 20 libros de gran éxito, escribe una columna periódica para Forbes y asesora y entrena a muchas de las organizaciones más conocidas del mundo. Tiene más de 2 millones de seguidores en las redes sociales, 1 millón de suscriptores al boletín de noticias y ha sido clasificado por LinkedIn como uno de los 5 principales influenciadores empresariales del mundo y el número 1 en el Reino Unido.

Herramienta de evaluación comparativa

La evaluación comparativa es la práctica de comparar los procesos empresariales y las métricas de rendimiento con los mejores del sector y las mejores prácticas de otras empresas. Las dimensiones que se suelen medir son la calidad, el tiempo y el coste.

La evaluación comparativa se utiliza para medir el rendimiento mediante un indicador específico (coste por unidad de medida, productividad por unidad de medida, tiempo de ciclo de x por unidad de medida o defectos por unidad de medida) que da lugar a una métrica de rendimiento que luego se compara con otras[1].

También conocido como “benchmarking de mejores prácticas” o “benchmarking de procesos”, este proceso se utiliza en la gestión en la que las organizaciones evalúan varios aspectos de sus procesos en relación con los procesos de las empresas con mejores prácticas, normalmente dentro de un grupo de pares definido con fines de comparación. Esto permite a las organizaciones desarrollar planes sobre cómo realizar mejoras o adaptar las mejores prácticas específicas, normalmente con el objetivo de aumentar algún aspecto del rendimiento. La evaluación comparativa puede ser un acontecimiento puntual, pero a menudo se trata como un proceso continuo en el que las organizaciones tratan de mejorar continuamente sus prácticas.

Cómo hacer un benchmarking pc

La evaluación comparativa es la ventaja competitiva que permite a las organizaciones adaptarse, crecer y prosperar a través del cambio. La evaluación comparativa es el proceso de medir las métricas y las prácticas empresariales clave y compararlas -dentro de las áreas de negocio o con un competidor, compañeros del sector u otras empresas de todo el mundo- para entender cómo y dónde debe cambiar la organización para mejorar su rendimiento. Hay cuatro tipos principales de benchmarking: interno, externo, de rendimiento y de prácticas.

1. La evaluación comparativa del rendimiento implica la recopilación y comparación de datos cuantitativos (es decir, medidas o indicadores clave de rendimiento). 2. La evaluación comparativa del rendimiento suele ser el primer paso que dan las organizaciones para identificar las deficiencias de rendimiento.

3. El benchmarking interno compara métricas (benchmarking de rendimiento) y/o prácticas (benchmarking de prácticas) de diferentes unidades, líneas de productos, departamentos, programas, zonas geográficas, etc., dentro de la organización.

Lo que se consigue: El benchmarking interno es un buen punto de partida para comprender el nivel actual de rendimiento empresarial. El benchmarking interno sostenido se aplica principalmente a las grandes organizaciones en las que ciertas áreas de la empresa son más eficientes que otras.

Objetivo de la evaluación comparativa

Tanto si su empresa es nueva como si ya está establecida, la evaluación comparativa es una poderosa herramienta que puede ayudarle a aumentar el rendimiento, hacer crecer su negocio y superar a la competencia. La evaluación comparativa es un proceso que consiste en medir el rendimiento de su empresa en comparación con los mejores competidores del mercado para poner de relieve las áreas en las que puede mejorar. Si desea realizar una evaluación comparativa, primero debe determinar qué partes de su empresa deben mejorar, así como las métricas que utilizará para medir e identificar el progreso. A continuación, recopila datos sobre tus competidores para ver qué hacen de forma diferente y cómo les funciona. A partir de esa información, puedes crear un plan de acción para alcanzar los objetivos que te has marcado y situar tu empresa en una posición competitiva dentro del mercado[1].